José Luis Font Nogués
“Como forma original del ministerio de la Palabra, la enseñanza religiosa escolar hace presente el Evangelio en el proceso personal de asimilación, sistemática y crítica, de la cultura” (DG, n. 73)
“La inteligencia de la fe es necesaria para responder de forma clara y convincente a los interrogantes de los jóvenes, para que ellos mismos sean capaces de responder a los retos que hoy se les presentan, a fin de que puedan hacer propia aquella respuesta decisiva que es Cristo Señor y sepan dar a sus amigos las razones de su esperanza” (TF). Benedicto XVI lleva a cabo esta inteligencia de la fe a través de la metodología y contenidos propios de la siguiente forma:
A. Metodología: ¿Cómo transmite Benedicto XVI la fe a los jóvenes?
a. Educar con la comunicación continua. Sigue la tradición de Juan Pablo II de estar muy cerca de los jóvenes: conquista fácilmente el interés de los que le oyen por su sencillez, modestia y bondad irradiante. Está convencido de la necesidad de prestar atención: “No descuidéis la relación con los jóvenes” (a sacerdotes en Varsovia, 25-5-2006).
b. Educar con la palabra y el diálogo. Le gusta que los jóvenes hagan preguntas: “Estimulad a los alumnos a hacer preguntas no solo sobre esto o aquello –aunque esto sea ciertamente bueno- sino principalmente sobre ‘de dónde’ viene y ‘a dónde’ va nuestra vida. Ayudadles a darse cuenta de que todas las respuestas que no llegan a Dios son demasiado cortas” (A profesores de religión y educadores en Munich). Así, a través del diálogo los jóvenes se expresan y Benedicto XVI puede ir al encuentro de sus dudas y preocupaciones con al respuesta de la fe.
c. Educar con los gestos. Seleccionamos dos gestos.
Primero, en la XX JMJ-Colonia no se limitó a explicar la doctrina de la Presencia Real de Crsito en la Eucaristía y, por tanto, necesidad de la adoración, sino que lo quew más habló a los jóvenes de ellos fue el largo tiempo de silencio con el Papa arrodillado delante de la custodia con la Sagrada Forma en un escenario de singular belleza. Muchos testimonian que es lo que más le enseñó, pero el mismo B 16 dice: “Entonces fui testigo del profundo e inolvidable silencio de un millón de jóvenes, en el momento de la adoración del santísimo Sacramento. Aquel silencio orante nos unió, nos dio un gran consuelo”
Segundo. En la vigilia que preparaba la JM del Domingo de Ramos (29-III-2007), como un sacerdote más de entre los 200 confesores, entró en un confesonario de S. Pedro para confesar a varios jóvenes de Roma.
B. Contenidos: Contenidos catequéticos de especial relieve en los discursos de Benedicto XVI a los jóvenes (TF, 85-94):
a. Adoración de Cristo presente en la Eucaristía: en Colonia el papa deja bien claro desde el primer momento que la adoración es la primera actitud que hay que tomar frente al gran misterio de la Eucaristía y lo muestra estando de rodillas ante la custodia.
b. Búsqueda del sentido de la vida. La santidad, identificación con Cristo, como proyecto de vida para cambiar el mundo. Para eso Benedicto XVI invita a los jóvenes a buscar a alguien: ¿Dónde encuentro los criterios para mi via? ¿De quién puedo fiarme? ¿Dónde está el que puede darme la respuesta satisfactoria a los anhelos de mi corazón?
c. La energía transformadora del misterio de la Eucaristía, a través de la imagen de la fisión nuclear: sólo la explosión del bien vence al mal. Benedicto XVI dijo en Colonia el 21.VIII.2005: “Haciendo del pan su Cuerpo y del vino su Sangre, anticipa su muerte, la acepta en lo más íntimo y la transforma en una acción de amor (…) Esta es la transformación sustancial (…) que estaba destinada a suscitar un proceso de transformación cuyo último fin es la transformación del mundo hasta que Dios sea todo en todos”
d. El verdadero sentido de la libertad como un saber orientarse según la medida de la verdad y del bien, para llegar a ser nosotros mismos verdaderos y buenos
e. La importancia del domingo: el weekend permanece vacío si no está en Dios
f. La importancia del sacramento de la Reconciliación, en la que la bondad misericordiosa de dios permite siempre iniciar de nuevo nuestra vida
g. Necesidad de conocer la fe de la Iglesia, porque hoy se busca sólo lo que agrada o la religión a la medida de cada uno y eso no ayuda
h. Comunión con el Papa y los Obispos, que nos garantizan que no escuchamos senderos particulares, sino que se está viviendo en la gran familia de Dios que El Señor ha fundado con los doce Apóstoles
i. La solidaridad como fruto de una vida eucarística: “siendo muchos somos un solo pan y un solo cuerpo, pues todos participamos de un solo pan” (San Pablo)
j. Construir sobre la roca: no se trata de dar unos buenos consejos a la juventud, sino de hacer apelo a la fe, ayudando a descubrir, de forma coherente y paso por paso, lo que Dios tiene que decir a cada uno desde su Palabra
Es decir, “siguiendo su estilo de Teólogo-pastor, el Papa Benedicto XVI, revela, también cuando habla a gente joven, su preocupación de una pastoral de la inteligencia de la fe, intentando responder de forma clara y convincente a los interrogantes de los jóvenes, para que ellos mismos sean capaces de responder a los retos que hoy se les presentan, a fin de que puedan hacer propia aquella respuesta decisiva que es Cristo Señor y que sepan dar a sus amigos las razones de su esperanza” (TF, 93)
BIBLIOGRAFÍA
DG Conferencia Episcopal Española. Directorio General para la Catequesis. Madrid 1997
TF Bernhard Körner. La transmisión de la fe a la luz de la nueva evangelización. VIII Simposio “La transmisión de la fe en la sociedad contemporánea”. Actas. Eunsa. Pamplona 2008